Commodities

El clima en EEUU continúa traccionando a la soja

Emilce Terré

La falta de lluvias aunada a temperaturas por encima de lo normal en el Medio Oeste norteamericano impulsaron los precios de la oleaginosa en la semana, con subas del 4% para la posición más cercana en el Mercado de Chicago que ajustó a u$s 523,24/tonelada, mientras que el contrato para la próxima cosecha que vence en noviembre escaló un 2% a u$s 498,81/tonelada.

El avance de los precios en el mercado externo, por su parte, incrementó la capacidad de pago de los exportadores locales motivando la realización de un mayor volumen de negocios al inicio de la semana en el recinto de nuestro Mercado Físico de Granos. Con el correr de los días, la corrección de las cotizaciones en Chicago presionó la disposición a pagar de la demanda local, y el ensanchamiento de la brecha entre las puntas compradoras y vendedoras se tradujo en un menor ritmo de actividad.

Al cierre de la semana, el Precio Pizarra de la soja para las operaciones del día jueves alcanzaron los $1.880/tonelada, un 4,4% por encima de la semana anterior. Para la soja nueva, en el recinto se ofrecieron abiertamente u$s 287/tonelada con entrega en el mes de mayo de 2014, por encima de los u$s 284/tonelada del viernes anterior pero un escalón debajo de los u$s 290,0/tonelada que se escucharon a principios de la semana.

En el Mercado a Término de Rosario, el contrato más cercano del Índice de Soja Rosafe ajustó al cierre de la semana a u$s 327,8/tonelada con una suba del 2% respecto al viernes anterior, mientras que la posición mayo cerró el viernes a u$s 290,7/tonelada, con un incremento semanal del 1%. Para los contratos de soja con entrega en condiciones fábrica, la posición septiembre subió un 2% en la semana hasta los u$s 331,0/tonelada, mientras que la posición mayo 2014 aumentó un 1% a u$s 292,9/tonelada.

La ola de calor y el faltante de lluvias en plena etapa crítica de desarrollo para el cultivo en EEUU han llevado al USDA a recortar el porcentaje de soja que se encuentra en condiciones buenas y excelentes al 58%, desde el 61% reportado la semana anterior. Además, se observa un retraso madurativo ya que apenas el 84% del cultivo se encuentra formando vainas, cuando el año pasado a esta altura dicha condición era alcanzada por el 95%, y el promedio de las últimas cinco campañas ronda el 90%.

Este retraso en el desarrollo exacerba el riesgo para los rindes potenciales de la soja norteamericana, al dejarla expuesta a temperaturas más extremas en las próximas semanas cuando, empeorando la situación, las lluvias aún continuarían por debajo de lo normal para esta época del año. Ante este panorama los precios de la oleaginosa en el mercado externo han tocado sus valores más altos en 11 meses durante la semana, aunque en las últimas sesiones corrigieron parte de esta suba.

En base a las condiciones vigentes, la consultora norteamericana Commodity Weather Group ha recortado su proyección de rindes promedio para la campaña estadounidense 2013/14 a 28,04 quintales por hectárea, un 6% menos que lo previsto en su estimación anterior.   Por su parte, Lanworth dio a conocer en la semana su proyección para la producción de soja en Estados Unidos de 85,46 millones de toneladas, en base a un rendimiento promedio de 27 quintales por hectárea, muy por debajo de las 88,60 millones de toneladas que preveía el USDA en su último informe.

Considerando que esta campaña partió con expectativas iniciales de una fuerte recuperación en la oferta global, el debilitamiento de la producción estadounidense genera preocupación en el mercado. Para el Hemisferio Sur, mientras tanto, pese a que aún no se ha dado comienzo a las labores de siembra las perspectivas todavía apuntan a una cosecha récord.

Para el caso brasilero, según la consultora local Agroconsult la cosecha de soja 2013/14 alcanzaría un récord de 88,4 millones de toneladas, por encima de las 81,46 millones del año anterior. Mientras tanto, datos oficiales de dicho país evidencian que las exportaciones agrícolas están mostrando un fuerte impulso ante la mejora en competitividad que otorga la devaluación del real respecto al dólar.

En lo que respecta a nuestro país, se estima que diversos factores podrían incidir en un aumento del área sembrada que, bajo condiciones de clima normales, posibilitarían una fuerte recuperación de la producción luego de que la última campaña resultase afectada por la sequía. En particular, los márgenes para el maíz se encuentran más ajustados que para el caso de la soja inclinando la balanza del productor en favor de esta última, a lo que se le suma la mejora en precios durante el mes de agosto. Además, si en las próximas semanas las lluvias continúan por debajo de lo normal la sustitución de ambos cultivos podría acentuarse.

En principio las encuestas realizadas por GEA dan cuenta de un aumento en la intencionalidad de siembras de entre el 10% y el 20% para la región núcleo, que a nivel nacional podría traducirse en una implantación que superaría cómodamente las 20 millones de hectáreas.

Mientras tanto, según datos del Ministerio de Agricultura las ventas a plazo de soja nueva continúan sin aparecer, y de la soja 2012/13 se negociaron 31,6 millones de toneladas. Para esta última, aún resulta llamativo el gran porcentaje de soja a la que resta ponerle precio, ya que con 19,4 millones de toneladas representa el 40% de la producción estimada por GEA.

De momento, el foco del mercado sojero continuará en el desarrollo climático norteamericano mientras se espera con ansia el próximo reporte de estimaciones del USDA, previsto para el 12 de septiembre. A partir de allí, la tendencia de los precios definirá si el productor sudamericano tiene el incentivo suficiente para convertir en realidad el aumento en la superficie que indican las intenciones de siembra.